Visitamos el taller de Ale Franco en Concordia, un día cualquiera, de sol.
A poco de participar nuevamente en la Bienal Internacional de Chaco, visitamos a Alejandra Franco en su taller en Concordia. Ale mezcla el barro con el río, con el sol, con nuestros bichos y yuyos, con nuestros ritmos. Con esa masa, logra tocar todas las caras de nuestra identidad. Demos una vuelta por ese mundo, de barro y amor, de chamamé y plumas, de pelos, señales y huellas.

Soy docente y militante gremial en Entre Ríos. Creo firmemente en la Educación Pública y en la organización del pueblo para la defensa de nuestros derechos. Soy aficionado a la fotografía, las imagenes me ayudan a ver, a entender y a contar, son expresión y testimonio. Soy usuario fiel de zapatillas, amante de los anteojos y los lentes manuales.